sábado, 26 de febrero de 2011

Bienvenido al Olimpo

Aquí tengo tu contrato. En él te comprometes a cumplir todas y cada unas de las condiciones de uso, abandonaras tu uso diario de los pecados capitales, y pasaras a la vida libre, a la buena vida. La lujuria abandonara tu mente, dejara de domirar todos tus pensamientos obscenos y sexuales, solo querras a esa persona, a la que te entregaste, con la que decidiste casarte, formar una familia, madurar. La gula desaparecera de tus tripas, de tu boca, de tu garganta y llegara hasta tu cabeza, hasta tu oido, susurrandote lo que tu sí tienes y los demás desearian poder llevarse a la boca, un triste trozo de pan, tan solo uno. La avaricia dará martillazos en tu interior, suplicará a tu conciencia hasta desaparecer, hasta morir ahogado entre mil y una culpavilidad. La pereza abandonara tus extremidades, todo tu cuerpo, aunque te obligue a volver a pararte, y asera demasiado tarde. La ira gritara, chillara a tus oidos, narrandote toda la suiciedad, todos los momentos en los que te matabas poco a poco por culpa de ella, todo los corazones rotos, las almas muertas, hasta ir callando , hasta desaparecer. La envidia recorrera tu estomago, te hara sentirte frío, vacío, muerto, todo cuanto te dejaste llevar por ella, hasta ser tragada por el resto de sentimientos. Y la soberbia, recordaras todas las veces en las que fardaste de tus pertencias y se las echastes a la cara a todos los demás que no podían defenderse, tú, que la superioridad pudo contigo, tú, que temes a no evitar pensar en la soberbia nunca más, tú, que renunciaras al pecado más importante, a no no nombrarlo, ni pensarlo. Si crees que podrás sobrevivir a todo esto, continua, pero si renuncias seras, tan humano como el resto, tan corriente. Este contrato no trata de ofrecerte el cielo, trata de ofrecerte la inmortalidad, el lujo de dejar de ser humano, de ser un nuevo Dios.

martes, 18 de enero de 2011

Everybody, but me..

Y en una simple noche de fiesta, el mundo se para, la música parece salir de otra habitación, la gente parece bailar, caminar, hablar a cámara lenta, y las luces moviéndose despacio, parpadean en el techo. Que fácil siguen los humanos al resto de la manada, en aquellos momentos es cuando me siento tan diferente al resto, tan rara. Todo el mundo quiere disfrutar, pero cuando ellos lloran, soy yo la que quiere ir a por todas. Que frío se siente el ambiente cuando todo es vacío en tu interior. Ahogándome entre el humo de mi propio cigarro, mientras ellos disfrutan. Que habrá en mi cabeza que ni los propios sentimientos hoy son capaces de conmover mi corazón, que sucederá por las noches para ver el terrible mundo de la frialdad cuando ya he cerrado los ojos al dormir, que pasará cuando por el día rodeada de tantas personas llego a sentirme terriblemente vacía, sola. Que cree que pasa si cuando estoy sola me siento sofocada y agobiada, que piensa mi cabeza de lo que sucede hoy en día. Rozar la muerte con la punta de los dedos, ver más allá del día de mañana, querer más que conocer, querer ir más y más lejos, al mundo que se respire oxígeno caducado y brille una pequeña estrella oxidada. Querer verlo todo pero a su misma vez no ver más, querer vivirlo todo, pero no. Yo no sigo a las masas, y la moda me aburre, quiero más, quiero saber y sentir que es el amor, el verdadero, el dolor, la felicidad, la tristeza, sentirlo, tocarlo, mirarlo, ser alguien. Quiero ser la luna por el día y el sol por la noche, quiero que la lluvia dure para siempre, que el gris de sus días sea mi color al despertar. Poseer miles de objetos materiales, pero no tener nada. Quiero sentir vacío cuando se deba, quiero no confundir las cosas de significados a colores. Quiero que el color azul solo exista para el mar y el verde para la naturaleza, que nada más en la vida tenga esos colores, así serían especiales al verlos. Quiero que todo acabe, pero continuando más allá. Quiero ser una niña, pero actuar como una mujer, quiero ser un animal salvaje y a la vez libre, quiero ser un corazón, pero solo para latir el momentos especiales, quiero ser una boca, y hablar el silencio. Quiero ver más allá del ojo humano y oír más allá del absoluto vacío. Quiero ser una estrella, y brillar cuando haga falta.